24 junio, 2010

India: no hay justicia para Bohpal

En 1984 tuvo lugar en Bohpal (India) el mayor desastre industrial de la historia: una fuga de isocianato de metilo de una fábrica de pesticidas de la Union Carbide acabó con la vida de varios miles de personas. Pero sigue sin llegar la justicia para las decenas de miles víctimas que aún hoy arrastran las secuelas de aquella tragedia. Porque llamar justicia a una sentencia que, tanto tiempo después, condena a ocho empleados de la filial india, por mera negligencia, a una pena de cárcel que no cumplirán y a una multa de 100.000 rupias (1.774 euros), cuando las compensaciones económicas que han recibido los afectados no son suficientes para cubrir los tratamientos médicos, ha sido interpretado por las asociaciones de afectados más bien como una burla.

A finales de los ‘90, Dow Chemical, actual propietaria de Unión Carbide, aceptó pagar más de 3.000 millones de dólares por haber implantado prótesis mamarias defectuosas a miles de mujeres estadounidenses. La comparación ahorra comentarios.

15 junio, 2010

Manifiesto Ciclonudista

Diez años ya. Diez años en los que nos hemos visto desnudos frente al tráfico, frente a la injusticia motorizada de las calles o frente al monstruo del ladrillo y del hormigón. Diez años en que hemos crecido e impulsado un movimiento mundial de repulsa a la dictadura del automóvil. Diez años para celebrar, estar felices, sentirse orgullosos y orgullosas, vivos y vivas, magníficos y magníficas y, sobre todo, para tomar nuevo impulso, renovar fuerzas, tomar consciencia de nuestra proyección hacia el infinito y seguir hacia adelante.

Diez años ya derribando fronteras. Una tras otra, todas y cada una de las que se nos han impuesto. Una tras otra armados y armadas tan sólo de nuestros cuerpos desnudos. Primero, las que dejan las calles a merced de la dictadura del coche. Después las que nos ha impuesto la especulación, la política del ladrillo y del hormigón, la obsesión perversa por el beneficio rápido a costa de las vidas, los sueños, las ilusiones de las personas.

Este año 2010 la frontera última nos reclama, aquella que distancia a las personas por el color de su piel, la naturaleza de su cultura o el lugar en el que se ha nacido. Pero más allá de estas valoraciones superficiales, aquellas fronteras que enfrentan a hermano contra hermana por un puesto de trabajo. La situación en la que nos ha puesto el capital especulativo, la codicia e inoperancia de unas pocas personas que ahora, cuando nosotros y nosotras nos manifestamos desnudas, andarán bien vestidas disfrutando del fruto de su miserable avaricia ajenas a la crisis que son responsables de desatar.

Esa crisis que ahora sufren primero los más débiles, los llegados de los territorios sometidos a los mayores expolios del planeta: africanos y africanas, europeos y europeas del este, iberoamericanos e iberoamericanas que han aceptado durante los años de bonanza económica los peores trabajos por los salarios más bajos, muchas veces sin cobertura social. Ahora estas personas son criminalizadas por el mero hecho de luchar por su supervivencia, criminalizadas, detenidas y encarceladas.

No debemos nunca olvidar, como no lo hemos hecho durante los últimos diez años desnudos y desnudas, que todos y cada una de nosotras, blancos, negras, cobrizos o amarillos, altas o bajos, profesoras de instituto, trabajadores sociales, manteros o albañiles, ingenieros o arquitectas no pertenecemos sino a una sola raza, a un único estrato social, a una única clase: la que congrega a millones de personas en el mundo obligadas siempre a conseguir un salario, a vender su capacidad de trabajo, para sobrevivir siempre sometida a los flujos de la economía. Esa clase que sabrá sobreponerse una vez más a las adversidades de la mano de los más débiles, de aquellas personas que duermen quizás hoy en prisión mientras los culpables de esta crisis continúan disfrutando de sus enormes beneficios a costa del sufrimiento de todos, esa clase que superará el tormentoso presente buscando un esperanzador mañana mucho mejor para todos y todas en que nunca más las personas deban subyugarse a la economía, al beneficio de unos pocos.

Por que aquí no sobra nadie sólo la ropa!!!

Por una ciudad sin fronteras!!!

Viva la Ciclonudista!!!

Vivan los trabajadores y las trabajadoras!!!

Nos vemos el año que viene!!!